¿Qué es la Enfermedad Diverticular?

La enfermedad diverticular es el nombre general dado a la enfermedad que crea pequeños sacos o bolsas en la pared del colon y las complicaciones que pueden surgir por la presencia de esos sacos. Hay muchos términos relacionados con la enfermedad diverticular que pueden ser confusos y merecen ser definidos. Los sacos o bolsas individuales se llaman divertículo. Múltiples sacos o bolsas (la forma plural del término divertículo) se llaman divertículos.

¿Qué es la Diverticulosis?

El término diverticulosis se refiere simplemente a tener divertículos dentro del colon pero sin complicaciones o problemas derivados de esos sacos. La presencia de diverticulosis puede llevar a varias complicaciones diferentes como diverticulitis, perforación, estenosis, fístula y sangrado.

¿Qué Parte del Colon se ve Afectada por la Diverticulosis?

Los divertículos pueden formarse en todo el colon, pero, en los Estados Unidos y otros países occidentales, el colon sigmoide es el sitio más común para la formación de divertículos. Los divertículos del ciego y del colon ascendente se ven ocasionalmente en los Estados Unidos pero son mucho más comunes en Asia.

¿Cuáles son las Causas de la Diverticulosis?

La causa exacta de la diverticulosis no se conoce. La teoría más aceptada es que las bajas cantidades de fibra en la dieta de una persona causan que las heces se vuelvan secas, obligando al colon a crear presiones más altas para mover las heces a través del colon. Estas altas presiones hacen que los puntos más débiles de la pared del colon se abulten, especialmente en puntos donde los vasos sanguíneos penetran la pared del colon. Junto con la formación de divertículos, las presiones altas en el colon pueden hacer que los músculos de la pared del colon se agranden o hipertrofien.

La diverticulosis es muy común y la proporción de la población con diverticulosis aumenta con la edad. Es raro que las personas menores de 30 años tengan diverticulosis, pero aproximadamente del 30-40% de las personas de 60 años tienen diverticulosis y hasta el 50-80% de las personas de 80 años tienen diverticulosis. La mayoría de las personas con diverticulosis no presentarán síntomas. De hecho, solo el 10-20% de las personas con diverticulosis desarrollarán síntomas, y de las personas que desarrollan síntomas, solo el 10-20% de esas personas necesitarán hospitalización y solo alrededor del 1% requerirá cirugía.

¿Cuáles son las Complicaciones de la Diverticulosis?

Diverticulitis

La complicación más común de la diverticulosis es la diverticulitis. La diverticulitis es una condición inflamatoria del colon que se cree que es causada por la perforación de uno de los sacos individuales. Se estima que del 10-20% de las personas con diverticulosis desarrollarán diverticulitis.

Los síntomas más comunes de la diverticulitis simple son dolor abdominal o pélvico, sensibilidad abdominal y fiebre. La diverticulitis complicada ocurre cuando se producen complicaciones secundarias después de un ataque de diverticulitis, y estas complicaciones incluyen la formación de abscesos y perforación del colon con peritonitis. Un absceso es una bolsa de pus que el cuerpo ha encapsulado, y la peritonitis es una infección que se propaga libremente dentro del abdomen. La peritonitis a menudo provoca que los pacientes se pongan bastante enfermos y puede ser potencialmente mortal.

Una vez que una persona tiene un ataque de diverticulitis, está en riesgo de sufrir más episodios y de desarrollar complicaciones. Es difícil definir el riesgo exacto de un ataque recurrente de diverticulitis en una persona que ha tenido un ataque previo, y hay muchos factores que pueden influir en este riesgo, incluida la edad del paciente y la gravedad del ataque inicial. La complicación más temida de la diverticulitis es la perforación y peritonitis, que a menudo requiere cirugía de emergencia y la creación de una colostomía. Varios estudios han demostrado que la gran mayoría de los pacientes en los que esto sucede nunca han tenido síntomas previos de sus divertículos.

Estenosis/Estrechamiento/Fístula

Otras complicaciones de la diverticulosis incluyen sangrado, formación de un estrechamiento en el colon que no permite que las heces pasen fácilmente (llamado estrechamiento), o formación de un conducto hacia otro órgano o la piel (llamado fístula). Cuando se forma una fístula, conecta más comúnmente el colon al vejiga. También puede conectar el colon a la piel, útero, vagina, o a otra parte del intestino.

Diverticulitis Crónica

La diverticulitis crónica es la condición en la que los pacientes pueden tener ataques repetidos de diverticulitis o pueden tener un curso prolongado de un solo ataque de diverticulitis. La diverticulitis crónica también se refiere a las complicaciones que surgen de ataques repetidos de diverticulitis, como estrechamiento y fístula.

Sangrado

Finalmente, los sacos diverticulares pueden sangrar. El sangrado puede ser leve en forma de una pequeña cantidad de sangre roja mezclada con las heces durante un ataque de diverticulitis, o el sangrado puede ser grave, involucrando la eliminación de coágulos oscuros de sangre que pueden o no ocurrir durante un ataque de diverticulitis. El tratamiento del sangrado diverticular difiere significativamente de otras formas de enfermedad diverticular. En resumen, la mayoría de los casos de sangrado se detendrán con atención de apoyo en el hospital o con técnicas mínimamente invasivas como la angiografía o la colonoscopia.

¿Quiénes están en riesgo de la enfermedad diverticular?

Un factor de riesgo es algo que aumenta la probabilidad de que una persona tenga una enfermedad o problema. Hay muchos factores de riesgo para la enfermedad diverticular, incluyendo:

• Dieta baja en fibra. Las dietas bajas en fibra, frutas y verduras y altas en carne roja son factores de riesgo para desarrollar enfermedad diverticular. Una dieta baja en fibra puede aumentar el riesgo en tres veces, por lo que agregar fibra a su dieta puede ayudar a proteger el colon de la enfermedad diverticular. En el pasado, se les decía a los pacientes con diverticulosis que evitaran nueces, semillas y palomitas de maíz, ya que se creía que esto podría aumentar el riesgo de diverticulitis, pero estudios más recientes han encontrado que esta recomendación no es cierta.

• Antiinflamatorios no esteroides (AINEs). El uso de AINEs como el ibuprofeno para condiciones como la artritis se ha asociado con complicaciones de la diverticulosis.

• Estado inmunológico. Los pacientes cuyos sistemas inmunológicos están suprimidos por medicamentos (esteroides o medicamentos contra el rechazo para un órgano trasplantado) tienen riesgo de complicaciones más graves como la perforación del colon.

• Alcohol. El consumo excesivo de alcohol puede aumentar el riesgo de diverticulitis en 2-3 veces en comparación con la población general.

• Edad y género. No está claro en qué medida la edad y el género son factores de riesgo para complicaciones de la diverticulosis. Las mujeres tienden a tener complicaciones de la diverticulosis más tarde en la vida que los hombres. Anteriormente se pensaba que los pacientes que tenían un ataque de diverticulitis antes de los 50 años tendrían una forma más virulenta de la enfermedad, pero esto no parece ser el caso.

¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad diverticular?

Como se mencionó, la mayoría de los pacientes con diverticulosis no tienen síntomas. Los síntomas más comunes de la diverticulitis son dolor abdominal y fiebre.

El dolor abdominal de la diverticulitis suele ser en la parte inferior y/o izquierda del abdomen. El dolor suele ser agudo y constante, y el dolor puede parecer viajar o irradiarse hacia la pierna, ingle, espalda y costado. También puede haber un cambio en los hábitos intestinales, como diarrea o estreñimiento. Los pacientes también pueden tener síntomas urinarios como aumento de la necesidad de orinar y urgencia urinaria.

Los pacientes con complicaciones de su diverticulitis pueden tener síntomas más crónicos o a largo plazo. Las heces delgadas o el estreñimiento pueden indicar la formación de un estrechamiento. La orina oscura y turbia o la liberación de aire con la orina pueden indicar la formación de una fístula hacia la vejiga.

¿Cómo se diagnostica?

La enfermedad diverticular y sus complicaciones generalmente se diagnostican a través de la historia clínica y el examen físico del paciente, a menudo con la ayuda de pruebas diagnósticas. Síntomas como dolor abdominal y sensibilidad no son específicos de la diverticulitis, y es importante distinguir la diverticulitis de enfermedades que pueden afectar otros órganos en el abdomen, como el apéndice, la vesícula biliar, el estómago, el intestino delgado, los ovarios, el útero, la próstata y la vejiga. Una historia clínica y un examen físico detallados pueden ayudar a reducir el diagnóstico o eliminar otros diagnósticos.

Las pruebas más comunes para ayudar a hacer el diagnóstico de la diverticulitis y sus complicaciones son análisis de sangre, análisis de orina y una tomografía computarizada (TC) del abdomen y la pelvis. Una TC se considera el “estándar de oro” para diagnosticar la diverticulitis. Puede mostrar qué parte del colon está involucrada y si hay signos de absceso, estrechamiento o fístula. A menudo se realizan análisis de sangre, y un conteo elevado de glóbulos blancos puede indicar la presencia de una infección. Un análisis y cultivo de orina puede detectar una infección del tracto urinario, lo que eleva la sospecha de una fístula desde el colon hacia la vejiga, ya que la orina estaría contaminada con heces del colon.

¿Cómo se trata la enfermedad diverticular?

La enfermedad diverticular puede desarrollarse de muchas formas y los pacientes pueden presentarse con varios grados de gravedad. Como era de esperar, no hay un tratamiento único para todas las formas de enfermedad diverticular. La siguiente discusión intentará describir varios tratamientos comunes para diferentes formas en que las personas pueden presentar la enfermedad diverticular.

La mayoría de las personas con diverticulosis nunca desarrollarán problemas a partir de ella. A los pacientes a quienes se les diagnostica diverticulosis en una colonoscopia de rutina u otras pruebas y que, de lo contrario, no tienen síntomas de diverticulitis, se les aconseja considerar el aumento de fibra en su dieta. Aunque no se